
Si la señorita Purdy dejase de usar ese rodete anticuado de bibliotecaria y se mostrase razonable, él no tendría problema en “hacerle el favor” y seducirla…
Bonnie O’Neal Purdy ya conoce a tipos de la calaña de Cash McCalley. Y los conoce por experiencia propia, ¡pues llegó a cometer el terrible error de casarse con uno de ellos! Pero ahora, como presidente de la Asociación de Damas en Pro de la Decencia y el Decoro, es su deber contribuir para el bien de la sociedad y de la humanidad, y desbaratar el plan de ese degenerado que quiere ganar dinero a costa de la violencia. Cash puede llegar a creer que conseguirá conquistarla con sus encantos, pero él no tiene ni idea de con quien se está metiendo…
Deja un comentario
Aún no hay comentarios.
Responder